Cuidando mis vínculos en pandemia.
Llevamos un año y poco más de pandemia. Un tiempo en el que hemos reducido el contacto físico con familiares y amigos. También los encuentros, las comidas y cenas en las que no solo nos poníamos al día, si no que también hacíamos sobremesas con risas o lo que surgiera.
Por otro lado, hemos aprendido a estar con nuestro núcleo más reducido, apreciando el estar en casa y todo lo que ha conllevado. Cocinar más, descubrir y aprovechar nuevos rincones en casa, las posibilidades del mundo virtual, la lectura, las compras online...
Al principio lo vivíamos como algo temporal que iba a pasar enseguida, pero, ahora, aunque sabemos que pasará, vemos que no lo hará tan rápido. Y que estas rutinas, según el momento de la ola en el que estemos, van y vienen.
Lo que yo siento es que echo de menos poder acercarme a las personas sin cuidado, poder abrazar, las reuniones numerosas. El contacto sin miedo, sin riesgo.
Porque el roce es lo que fortalece nuestras relaciones. Es la sincronicidad de experiencias lo que alimenta el vínculo. Hacer cosas juntos. No es lo mismo decir, mira esta película que esta muy bien, que verla juntos, y reír o llorar a la vez.
¿Cómo podemos seguir cuidando nuestros vínculos?
Los cambios de horarios laborales, los cambios de rutinas según el estado de los contagios, a veces nos impiden pensar con claridad y poder hacer planes.
Yo hoy al escribir me doy cuenta de que necesito sentir la compañía y el contacto de las personas que quiero. Que me siento vulnerable y sola, si siento lejanía y desconexión.
Esta bien dejarme sentir esto, porque justo estos sentimientos me están indicando lo que estoy necesitando. Y la flecha de lo que siento me lleva a buscar encuentros al aire libre, "legales", conversaciones sinceras, mirar, ser mirada, y sobre todo dejar que surjan las risas y muchas.
- Y tu, ¿que notas que te está haciendo falta?
- ¿como es no tener eso?
- ¿qué sientes al darte cuenta de eso que necesitas?
- ¿hay algo que puedas hacer por ti? algo mínimo, pequeñito, un gesto, una acción, una palabra, una conversación...
Escribo textos con algunas preguntas, con la intención de que cojas lápiz y papel, y las vayas contestando. En este y otros artículos podrás encontrar algunas más.
Busca un momento para ti, en el que puedas estar tranquil@, y da respuesta a las preguntas, sin pensar demasiado, escribiendo libremente y sin filtrar.
Te animo a que lo hagas, a veces es muy sorprendente, liberador, y casi siempre, se nos abre una puerta que desconocíamos.
Marta Costa Salvador
Pedagoga de orientación gestáltica, Nº col 1137
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Terapia psicológica presencial y on-line
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